El proyecto CUCO lo formamos Jose Angel EA5HIR y Agustín EA5I respaldados por un gran grupo de radioaficionados. Empezamos buscando la excusa para reunirnos los fines de semana y pasar un tiempo en torno a la radio con actividades al aire libre. Ahora ese grupo de amigos se ha multiplicado y desde cualquier punto de España y el mundo se puede formar parte de el. El Cuco es la típica construcción agrícola que antaño encontrábamos en los viñedos de La Mancha, sirviendo de refugio y hogar durante las jornadas de trabajo. Actualmente hay algunos en la Manchuela Albaceteña, recordando la dureza de la naturaleza y la fragilidad del hombre que busca protegerse. En la frontera entre Madrigueras y Motilleja, donde desarrollamos muchas de nuestras actividades, se encuentra un Cuco que nos recuerda el ingenio y la humildad de nuestros predecesores. De ellos aprendemos y hacemos bandera.

Hemos cumplido nueve años y esperamos que sean muchos más. Un camino que comenzó en busca de compartir experiencias, buenos momentos con nuestros amigos y siempre con la radio como punto de partida y que no nos ha defraudado en absoluto. Ahora somos más, algunos con la experiencia de habernos conocido físicamente en alguna de las actividades y muchísimos, todavía, a la espera de ese momento. En nuestro hobby no hay distancias o mejor dicho nuestro objetivo cuando encendemos el equipo es que no las haya. Eso solo lo entendemos los radioaficionados y nosotros lo hemos conseguido. El CUCO Team lo formamos ahora más de 100 entusiastas de todos los rincones de España y de 28 países que nos siguen a través del Blog diariamente. Nos llaman, nos escriben, nos dan ideas, nos preguntan, nos corrigen y sobre todo nos animan a seguir y crecer. El CUCO es una experiencia entorno a la técnica, la naturaleza y la amistad, así lo resumiría después de este tiempo.


lunes, 26 de noviembre de 2018

Máxima potencia a aplicar en antenas.

Todos nos hemos encontrado, cuando abrimos la caja con nuestra nueva antena, una anotación donde se nos indica la potencia máxima de trabajo para ese sistema radiante. A menudo, nosotros así lo hacemos, incluso se reseña un tope recomendado que puede tener un margen mas o menos significativo, dependiendo del tipo de modulación o modo de transmisión. No será lo mismo transmitir en SSB, con sus pausas y diferencias en la modulación que emplear una transmisión en modo "máquina". Los famosos picos, pueden darnos momentos muy amargos pero del mismo modo las altas potencias mantenidas pueden poner al límite nuestra antena.

Un colega me decía una vez que no se podía imaginar derritiéndose el aluminio de su flamante directiva, tenía razón. Pero el aluminio no es el único material, pequeños componentes, conexiones, latiguillos, conectores crimpados o estañados, son también parte del conjunto y todos contribuyen en la distribución y emisión de la RF entregada a la antena. En nuestro campo de trabajo y cuando hablamos de dipolos de hilo, también es recomendable respetar esos márgenes y aunque nos hayan dicho alguna vez que a un dipolo de 2.5Kw máximo le han metido 5Kw y no ha pasado nada, cuidado. 

Las bazooka de Cuco, desde el primer momento, las construimos atendiendo a tres condiciones: hilo coaxial de máxima calidad, conexiones soldadas manualmente al aire y mecanizado de los puntos de transición entre materiales con protección calórica y antihumedad. Nuestra recomendación de potencia máxima a aplicar se basa en las especificaciones de los cables y resulta ser menor que la tolerancia en las conexiones. Por lo tanto, si superamos la potencia recomendada pueden o no ocurrir "cosas", por supuesto considerando ciertos márgenes, no medibles y el factor suerte.

Este bote de conexiones lo reventamos para conocer los límites de las conexiones de estaño, hemos trabajado con tres distintas composiciones hasta elegir la actual. El PL hembra de la base fue el punto débil tras aplicar 3.5Kw en modo PSK durante 45 minutos casi continuados. Esta antena tenía una potencia máxima recomendada de 1Kw. Era RG58 de los primeros modelos, 50 Ohmios.

No se aprecia muy bien, pero el coaxial está perfecto. En este caso es RG59.

Los botes de aluminio anodizado no son conductores y actúan como pantalla extra.

Nuestras pruebas nos han permitido ver como un dipolo cerrado como la bazooka, aguantará lo indecible hasta que por algún lado corta la transmisión y deja de ser una antena y pasa a quedar como un balancín para las golondrinas o los grajos, ahora en otoño. ¿Que será necesario para provocar una fractura en la soldadura de estaño entre los cobres o para crear un arco voltaico entre las conexiones de una trampa de coaxial, aislada y perfectamente sellada.? Buena pregunta. Te aseguro que hay quien lo sabe... 

Seamos prudentes con los AL y usemos antenas adecuadas a esas potencias. Entiendo que es una tentación cuando tenemos una Cuco, que chuta como un cañón, meterle unos cuantos miles de W para dar tres vueltas al Globo y escucharnos con calidad cuadrafónica, pero el final en ese caso estará muy cerca y luego no puedes sorprenderte. ATENCIÓN a los límites, que existen y están ahí.

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